Tomar decisiones inteligentes al usar tu tarjeta de crédito puede cambiar la historia de tu vida financiera.
El pago mínimo es la cantidad más baja que exige un banco para mantener la tarjeta vigente y evitar caer en mora. Por lo general, ronda entre el 2% y 5% del saldo pendiente, dependiendo de la entidad y el tipo de tarjeta.
En contraste, el pago total implica la liquidación completa del monto adeudado al cierre del periodo: consumos, retiros de efectivo, comisiones e intereses.
Cada banco aplica su fórmula, pero en México el pago mínimo siempre será el mayor de los siguientes cálculos:
Por ejemplo, si debes $1,000 y tu pago mínimo es 5%, solo pagarás $50. El resto del saldo generará intereses al siguiente corte.
Muchas personas, como Luis, han visto crecer su deuda por años sin entender por qué nunca disminuye. Para salir de ese ciclo, sigue estos pasos:
Aplica la regla del 50/30/20: dedica 20% de tus ingresos a pagar deudas, 50% a necesidades básicas y 30% a gastos personales y ahorro.
Pagar solo el mínimo de forma recurrente no implica una caída inmediata de tu score crediticio, pero sí:
- Muestra un perfil de alto riesgo ante futuros créditos.
- Puede limitar tus opciones de financiamiento para vivienda o auto.
En contraste, liquidar el total mes a mes te ayuda a construir un historial saludable, demostrando disciplina financiera y responsabilidad con las deudas.
Cuando dejas de pagar el mínimo cargan comisiones moratorias, aumenta tu tasa de interés y, a largo plazo, la institución puede suspender tu línea de crédito. Además, tu historial se verá seriamente afectado, restringiendo tu acceso a productos financieros y encareciendo futuros préstamos.
Según datos de 2025 de la Reserva Federal de Filadelfia, 1 de cada 10 consumidores en Estados Unidos solo cubre el pago mínimo mensual. En México, estudios recientes muestran que más del 35% de los tarjetahabientes se limitan al pago mínimo cuando enfrentan emergencias.
María, una joven profesional, logró salir de una deuda de $15,000 en menos de dos años al aplicar un método de pagos escalonados: cada mes aumentó su abono en 5 puntos porcentuales hasta liquidar por completo su saldo.
La clave para un uso responsable de tu tarjeta de crédito radica en:
- Priorizar siempre el pago total cuando tu flujo de caja lo permita.
- Utilizar el pago mínimo solo como recurso de último momento.
- Diseñar un presupuesto realista y comprometerte con metas de ahorro y reducción de deudas.
Decidir entre pagar el mínimo o el total en tu tarjeta no es solo una cuestión de números, sino de tu futuro financiero. La disciplina y la información son tus mejores aliadas para evitar deudas interminables y construir un patrimonio sólido.
Empieza hoy: revisa tu estado de cuenta, planifica tus pagos y elige la ruta que te lleve hacia la libertad económica.
Referencias